El Proyecto REDES (dic 2022- nov 2024), en convenio con el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE) en Ecuador, realizó un trabajo en conjunto para fortalecer la gestión turística sostenible en seis áreas naturales protegidas y en el destino piloto Saraguro. La iniciativa aplicó criterios de sostenibilidad reconocidos internacionalmente, con un enfoque en la mejora continua y la articulación entre actores públicos, privados y comunitarios.
Las áreas beneficiadas fueron:
- Parque Nacional Sumaco: se encuentra en la región amazónica de Ecuador, entre las provincias de Napo y Orellana.
- Parque Nacional Cayambe-Coca: abarca parte de las provincias de Pichincha, Napo, Imbabura y Sucumbíos, en la región interandina y amazónica.
- Reserva Ecológica Los Ilinizas: está ubicada en las provincias de Cotopaxi y Pichincha, en la región interandina.
- Parque Nacional Antisana: situado en las provincias de Napo y Pichincha, en la zona andina.
- Parque Nacional Cotopaxi: ubicado en las provincias de Cotopaxi, Napo y Pichincha, en la región andina central.
- Área Nacional de Recreación El Boliche: se encuentra dentro del Parque Nacional Cotopaxi, principalmente en la provincia de Cotopaxi, en la Sierra central

Avances que dejan huella
A lo largo del proyecto, se alcanzaron resultados concretos que fortalecen la administración y conservación de estos espacios:
- Compromisos interinstitucionales sólidos: realización de reuniones de socialización con actores clave y conformación de Comités de Gestión con participación equitativa de representantes de la cadena de valor turística.
- Planes estratégicos para una gestión más eficiente: desarrollo e implementación de documentos técnicos como el Plan de Manejo de Visitantes, Plan de Mejora Continua, Plan de Gestión de Riesgos, Plan de Igualdad de Género, Plan de Medidas para evitar la erosión de senderos, Plan de Uso Eficiente de la Energía y Plan de Gestión de Residuos y Desechos.
- Participación y retroalimentación de los visitantes: aplicación de 302 encuestas de satisfacción en puntos de control y senderos, además de la instalación de buzones digitales con código QR para recoger sugerencias en tiempo real.
- Mejoras en infraestructura y señalización: mantenimiento de instalaciones clave, renovación de rótulos informativos y diseño de señalética y material de orientación para visitantes.
- Capacitación y fortalecimiento de capacidades: formación continua para el personal en prácticas sostenibles, gestión de visitantes, manejo de residuos y ahorro energético, así como la conformación de brigadas de agentes de control ambiental

Resultados en cifras
Acción implementada | Resultado destacado |
Áreas protegidas intervenidas | 6 áreas protegidas + 1 destino piloto |
Participación | Integración de instituciones públicas, privadas y comunitarias en Comités de Gestión |
Gestión de visitantes | Ejecución del Plan de Manejo de Visitantes en el PN Cayambe-Coca, entre otros. |
Monitoreo de satisfacción | 302 encuestas aplicadas en 3 guardianías |
Canales de retroalimentación | Implementación de buzones digitales con código QR |
Planes estratégicos desarrollados | 10 planes clave en gestión, riesgos, energía, residuos, género y senderos |
Infraestructura | Mantenimiento periódico de instalaciones y señalización |
Capacitación | Formación continua en gestión turística sostenible y prácticas ambientales |
Brigadas ambientales | Conformación de Agentes de Control Ambiental |
Un trabajo conjunto que marca la diferencia
Cada acción desarrollada ha sido posible gracias al esfuerzo coordinado de guardaparques, instituciones y prestadores de servicios turísticos. El proyecto no solo ha generado mejoras visibles, sino que ha dejado instaladas capacidades y herramientas para mantener un modelo de gestión sostenible en el tiempo.
El Proyecto REDES extiende un especial agradecimiento a la coordinación técnica del proyecto en Ecuador y a todo el equipo del MAATE que, con constancia y compromiso, ha hecho posible estos resultados. Este trabajo conjunto demuestra que la conservación de la naturaleza y el turismo responsable no son caminos separados, sino una misma ruta hacia el desarrollo sostenible.





